
Soy María Jesús, soy Coach. Y lo soy «gracias a» o «como consecuencia de» vivir una vida poco convencional y nada rectilinia.
Soy madre de tres adolescentes que encajan en el perfil de niños de tercera cultura (TCK en inglés), pareja de un diplomático, licenciada en empresariales, educadora, española por nacimiento, belga por amor y también un poco de cada país en el que he vivido porque todos me han aportado mucho. Lo dejo ahí.
Desde hace más de 20 años vivo en el mundo de la expatriación disfrutando de lo inusual de este tipo de vida y afrontando sus desafíos, aceptándola tal y como es, con sus espinas y sus muchas flores.
A lo largo de mi vida he vivido en 8 países repartidos por 5 continentes. He experimentado la expatriación sola, en pareja, y ahora con mi familia al completo.
Vivir una vida de alta movilidad internacional me ha transformado, permitiéndome descubrir el mundo exterior y mi mundo.
Mi misión es facilitar un servicio de acompañamiento personal honesto y asequible para que cada transición en sus vidas no lineales les permita identificar y alcanzar a sus objetivos.
Quiero que cuentes conmigo para ayudarte a vivir en PRIMERA PERSONA tu vida, especialmente cuando vives en expatriación acompañando a tu pareja.
En mi opinión vivimos en primera persona cuando:

- somos conscientes de lo que queremos que haya en nuestra vida y obtenerlo es nuestro GPS vital.
- degustamos el jugo de una vida no lineal con su punto ácido, a veces amargo.
- apreciamos nuestros caminos en la vida, los valoramos tanto como los destinos donde queremos llegar.
- nuestros destinos no son el final de nada, sino una etapa en nuestro camino.
En mi vida, el coaching y el desarrollo personal han sido elementos clave para, nombrar, identificar y priorizar mis roles, capacidades, prioridades, aspiraciones. Y estas grandes cuestiones vuelven a aparecer con cada mudanza.
Gracias al coaching he rediseñado varias veces mi trayectoria profesional y he desarrollado una actitud abierta y curiosa hacia lo desconocido.
Si quieres, aquí estoy, a tu lado, para que tú también de que tú también lo experimentes.
En expatriación, es crucial practicar el autoconocimiento, la adaptabilidad y mantener vivo el espíritu de aventura para disfrutar del camino de nuestra vida.